Preguntas frecuentes

Para lograr esto, el paciente deberá comprometerse, motivarse y activarse en lo que se va proponiendo en el proceso psicoterapéutico.

Es probable que en un principio la persona pueda ir sintiéndose mejor, pero según mi experiencia, es necesario un proceso de algunos meses para que los resultados se vayan estabilizando realmente en el tiempo y la mejoría no sea simplemente a corto plazo.

Mi preocupación por el tipo de vínculo con la otra persona, dándole mucha importancia así, al contexto de trabajo. Considero que esto, junto con las técnicas y mi forma de guiarlas, hace que ésta sea una psicoterapia especialmente profunda, efectiva, y por lo tanto sanadora. Esto la va diferenciando de la gran mayoría de psicoterapias, que dedican todo o casi todo el tiempo, a realizar un cambio, solo en el centro intelectual.

Para esto, las sesiones de psicoterapia que ofrezco tienen una duración de entre 1 hora y 30 minutos y 2 horas. Lo considero así, debido a que es el tiempo que se necesita para alcanzar un verdadero proceso de sanación. De esta forma, los darse cuenta y revelaciones, alcanzarán a tener un impacto integral en la persona. Es decir, que el cambio no ocurra solamente a un nivel intelectual, el cual es un cambio solo a corto plazo, sino que esto ocurra a un nivel profundo y completo, repercutiendo así también en el centro emocional y el cuerpo o centro motor.

Ante esto, una sesión de esta psicoterapia logra ser más significativa que dos sesiones convencionales de una hora, que suelen consistir en solo hablar sobre lo que le ocurre a la persona.

Desde pequeño he sentido un interés especial en realizar una ayuda al otro de una manera profunda y duradera. Al conocer el camino de la espiritualidad, supe que la forma tenía que proceder de aquellas fuentes. Encontré que la sanación puede abordarse desde una psicología, cuya psicoterapia tenga esta profundidad y sensibilidad.

Veo a la psicoterapia como un regalo al mostrar el camino espiritual a recorrer. Además, la veo como un regalo para mí como psicoterapeuta, al tener el privilegio de poder acceder al mundo de las personas en su hermosa profundidad.

Estoy seguro que la integración de habilidades psicoterapéuticas, como la empatía, la aceptación incondicional, la autenticidad y la escucha activa, han sido claves para ir logrando esta sensación e imagen en los demás.

Definitivamente sí. Mientras puedas realizar la sesión en un espacio íntimo y tranquilo, podremos lograr cualquier tipo de objetivo que vayamos planteando en la psicoterapia.