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Psicología Humanista

La Psicología Humanista nace en un momento en que el Psicoanálisis y el Conductismo estaban imperando en la sociedad. Las personas que fueron creando esta nueva forma de hacer psicología, realmente lo hicieron por una propia necesidad. Comenzaron a sentir y a darse cuenta, que el Psicoanálisis y el Conductismo, daban resultados superficiales en la ayuda a las personas. https://es.wikipedia.org/wiki/Psicolog%C3%ADa_humanista

Si consideramos que los seres humanos poseemos 3 centros claves, como lo son el Centro Intelectual, el Centro Emocional y el Centro Motor, que se refiere al cuerpo, los últimos dos estaban siendo bastante ninguneados por las psicologías ya mencionadas. Esto implica que la percepción que se tiene sobre el ser humano es incompleta y por lo tanto, el trabajo así también lo será. Debido a esto, la Psicología Humanista vuelve a poner a las emociones y al cuerpo dentro de la importancia que merecen. Se ha de comprender, además, que lo que ocurra en un centro, inevitablemente influirá en los otros. https://psicologojuanpablomontes.com/sincronicidad-y-autobservacion/

Esta idea, nos lleva a la comprensión de un principio básico en la Psicología Humanista: todo está conectado con todo, lo que nos lleva a comprender que este paradigma en Psicología es Holista, y así dejar de tener una mirada miope o parcial sobre los seres humanos.

Otro principio fundamental de esta Psicología, es la importancia de la experiencia, por lo que las diversas escuelas de la Psicología Humanista realizan terapias experienciales. Esto quiere decir que en la psicoterapia humanista, no consistirá simplemente en hablar sobre lo que a la persona le ocurre. En esta psicoterapia, a su vez, el psicoterapeuta, a través de diversas técnicas, creará y propondrá experiencias en las sesiones, para que la persona vaya poco a poco conectando con el presente o aquí y ahora. Con ello, la persona así irá realmente sintiendo y conectando con los 3 centros mencionados anteriormente, pero especialmente con su cuerpo, sensaciones y emociones.

Este tipo de experiencias, facilitan en los buscadores (pacientes) comenzar a trabajar su propio ego, así como sus heridas: que pueden ser recientes, como las profundas y antiguas, las cuales provienen de su infancia; revisar sus creencias, prejuicios, su propio sentido de la vida, la construcción de su identidad y de su camino en la vida, entre otras cosas.

Para la Psicología Humanista este trabajo sobre el ego y sus condicionamientos es fundamental. Este trabajo permite ir limpiando y purificando nuestro ego, lo que nos permitirá ir centrándonos cada vez más. Esto facilitara el no dejarse llevar por las fuertes energías emocionales y la mente o diálogo interno.

Uno de los propósitos finales de esta Psicología, es que, gracias al trabajo sobre el ego, la persona pueda ir conectando con su propio potencial humano. Esta energía, es el equivalente a la verdadera luz interna o esencia que tenemos cada uno de nosotros. Al conectar con nuestro potencial o esencia, es cuando sentimos y mostramos al mundo lo mejor de sí y es lo que nos hace ser personas únicas e irrepetibles.

Como última reseña, cabe destacar que la Psicología Humanista no se centra en la patología, sino que en la expansión y el crecimiento, en donde el concepto de Desarrollo Personal es algo fundamental en el trabajo con las personas.

Psicología Transpersonal

Esta psicología aparece al poco tiempo después que la psicología Humanista, convirtiéndose rápidamente en su hermana. Si bien se diferencian, sus principios y objetivos del trabajo terapéutico, van en la misma dirección, por lo que ambas se complementan de una forma natural.

La palabra transpersonal quiere decir atravesar el ego. Partiendo de esta base, lo que pretende la Psicología Transpersonal, es ayudar a que las personas conecten desde un principio con su propia esencia humana. https://es.wikipedia.org/wiki/Psicolog%C3%ADa_transpersonal

Si bien la Psicología Humanista considera fundamental trabajar profundamente al ego para luego conectar con nuestra esencia, la Psicología Transpersonal, intenta realizar la conexión con nuestra luz interna de manera directa. Para ello se basa, por ejemplo, en diferentes técnicas de meditación y respiración. Es así, como podemos ir entendiendo que esta psicología tiene un componente espiritual fundamental, en donde ha bebido de diversas fuentes del mundo oriental, como el budismo, el hinduismo, el taoísmo, etc.

Otro componente fundamental en la Psicología Transpersonal, apunta al famoso “Conócete a ti mismo”, del cual hablaban los antiguos griegos. Acá la comprensión apunta a que, a través de la propia auto observación del ego, conoceremos como hemos ido creando una serie de personajes para vivir en la vida, lo cual nos disocia. Con esto dejamos de ser nosotros mismos y con ello, nos alejamos de nuestra esencia.

En definitiva, la Psicología Transpersonal, ha ido más allá. Esta psicoterapia se propone rescatar la naturaleza espiritual del ser humano, concibiendo a que nuestra personalidad, es solo un aspecto del ser. El ego o personalidad, es una estructura adaptativa y defensiva, estimando que la salud implica principalmente un apartarse de la identificación exclusiva con ella, más que su modificación.

En base a esto último, la Psicología Transpersonal lo que va a intentar en su trabajo, es que ya no sea el ego el que guie nuestra vida, sino que quién debe hacer esto es nuestra Esencia, que es el descubrir quién somos realmente.

Date cuenta de tu mundo interno, la clave está en el sentir. El hábito es estar en la mente. Tenemos que romper ese tipo de hábitos. También tenemos que aprender a desplegar nuestra esencia que está esperando en el mundo interno. Ya es hora de que encontremos nuestro camino en esta vida, ya es hora de despertar.